GUILLERMO ESTÉVEZ BOERO, UN SOCIALISTA

A través de las cientos de columnas que llevo presentada semana a semana en este medio, he podido compartir con ustedes historias de grandes dirigentes políticos del país y sus cercanías a nuestra ciudad. Desde el padrinazgo de Yrigoyen, la amistad de Lisandro de la Torre, las mujeres que estuvieron con Evita y los hombres de Perón en Cañada. Hoy es el turno de Guillermo Estévez Boero, quién durante muchísimos años tuvo su estudio jurídico sobre calle Lavalle, donde se encontraba el Estudio Lassaga, en pleno centro cañadense.


Nacido en Rosario un 28 de diciembre de 1930, con apenas 22 años llegó a ser presidente del Centro de Estudiantes de Derecho de la Universidad del Litoral y en 1958 fue unos de los líderes en las marchas “Laica o Libre", defendiendo la educación pública siendo el autor de la famosa carta enviada al Ministro de Educación Gabriel del Mazo bajo la presidencia de Arturo Frondizi. Al año siguiente es elegido presidente de la Federación Universitaria Argentina (FUA), fundando en 1960 el Movimiento Nacional Reformista (MNR). Integró la generación de estudiantes universitarios que se formó en los principios sociales y humanistas de la Reforma Universitaria de 1918, fue un lector incansable de los protagonistas de aquella gesta: Gabriel Del Mazo y Deodoro Roca, y de quienes la acompañaron como Alfredo L. Palacios, Julio V. González, José Ingenieros, Alejandro Korn, entre otros. Al igual que ellos, Estévez Boero encontró en la Reforma un programa, un compromiso y un sueño.[1]  Durante sus estudios y al finalizar los mismos participó en agrupaciones como Acción Socialista junto a Dardo Cúneo, de donde surge el Partido de los Trabajadores y de esas filas es elegido Convencional en 1957 Juan Carlos Delhi, donde Estevez Boero colaboró asiduamente. De aquellos primeros años quedó grabada la frase "se marcha, no se llega", que lo acompañó toda su carrera. Durante los sesenta también participa en la formación del Movimiento de Acción Popular Argentino, (MAPA). En los comienzos de los setenta escribe Realidad Política Argentina (RPA) donde propone un nuevo enfoque de los grupos sociopolíticos y sostiene que tanto el radicalismo como el peronismo constituyen movimientos populares enfrentados a las elites económicas locales y extranjeras, y que el ciclo golpe-elección solo podría ser superado por un acuerdo entre peronistas, radicales y fuerzas progresistas que llevara a un sistema democrático estable fundado en un régimen económico de "liberación nacional".

En 1972 funda el Partido Socialista Popular, buscando una alternativa entre las fuerzas mayoritarias de entonces, que no estuviera enfrentado con las mismas. Aquella “quijoteada” fue acompañada por muchos jóvenes dirigentes y estudiantes universitarios como Antonio Bonfatti, Hermes Binner, Carlos Fernández, Raúl Lamberto, Héctor “Tigre” Cavallero, entre otros tantos. Al llegar los años duros de la dictadura cívico militar que gobernó Argentina entre 1976 y 1983 fue un activo opositor a la misma, manteniendo el partido en funciones a pesar de la prohibición de la actividad política y de las severas condiciones de represión. Participó en foros internacionales, como la Internacional Socialista, donde denunció la situación de violación masiva de los derechos humanos en Argentina.  Alentó a los afiliados de su partido a participar de las acciones sindicales y estudiantiles de resistencia a la dictadura militar, como la huelga general de 1979 convocada por la fracción de la CGT denominada "los 25", la manifestación de San Cayetano de 1981 convocada por la CGT, y la gran manifestación del 30 de marzo de 1982 convocada por la CGT Brasil. En 1981 participó en la creación de la Mesa de la Unidad Socialista presidida por la Dra. Alicia Moreau de Justo, y cuya vicepresidencia la ejercieron Estévez Boero en representación del PSP y Francisco Passini por el Partido Socialista Democrático (PSD), siendo los artífices de la Alianza Unidad Socialista constituida en 1985 que confluyó en la unificación de ambos partidos, el 14 de septiembre de 2002, recreando al actual Partido Socialista.[2] En 1983 fue candidato a Presidente de la Nación, entre los años 1985 y 1987 integra el Consejo para la Consolidación de la Democracia. En 1987 resulta electo como diputado nacional en representación del pueblo de la provincia de Santa Fe, constituyéndose en el primer parlamentario socialista después de la muerte de Alfredo Palacios en 1965, siendo reelegido en 1991, 1995 y 1999. En 1994 participó como Convencional en la Reforma de la Constitución Nacional. Entre sus máximos proyectos podemos destacar el Consejo Económico Social, la Ley de medicamentos, la Creación de los comités de condiciones y medio ambiente de trabajo, la  Ley de investigación biomédica, la  Ley de prestaciones básicas en rehabilitación integral para discapacitados,  Régimen legal de las universidades, Ley de la juventud, entre varias otras. Cabe agregar que jugó un rol decisivo en el acuerdo definitivo de límites entre Chile y Argentina de 1998.

El 3 de febrero de 2000, debilitado por una ardua lucha contra el cáncer fallece después de ver a un presidente socialista en Chile, Ricardo Lagos, pero también pudo ser testigo del modelo Rosario cuando Héctor Cavallero y después Hermes Binner gobernaron la segunda ciudad de Argentina. Pero también pudo ver un intendente en Casilda Edgar Tomat un intendente en Las Parejas Antonio Bonfatti, concejales en Cañada de Gómez y la región. Lamentablemente se perdió la llegada de aquellos jóvenes a la gobernación de aquella provincia a la que tanta veces defendió. Cuando el PSP cumplía sus primeros 25 años se le preguntó porqué el Socialismo, a lo que respondió, “La razón de ser del socialismo es la sensibilidad ante la injusticia que produce y multiplica un sistema. Entonces los hombres piensan en la construcción de otro sistema, de otro modelo que produzca menor cantidad de injusticia o injusticias no tan grandes si pensamos que es muy difícil llegar a una sociedad absolutamente perfecta.”[3]

En tiempos donde las ideas y los dirigentes son reemplazados por gerente de empresas, donde al pueblo se le impone una grieta cada vez más abismal, es bueno recordar a los militantes que desde sus espacios pelearon para una mejor distribución de las riquezas, en pos del progresismo del pueblo y quiénes junto a otros radicales y peronistas de entonces levantaban las banderas de la Solidaridad frente al Hombre, frente a la Sociedad y frente a la Familia. No perdamos las esperanzas, los días más felices volverán y quizás no falte mucho.




[1] Biografía de Guillermo Estevez Boero en www.estevezboero.com.ar
[2] Idem.

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